¿Te gustaría practicando el senderismo alcanzar una de esas cimas con vistas espectaculares? ¿Eres aficionado a las sendas que recorren zonas de umbría dentro de parajes naturales? Pues sigue leyendo esté artículo. Te gustará. Las ruinas de una fortaleza enclavada a una altura de 553m de altitud y con espectaculares vistas será nuestro destino. Vallada es un municipio que se encuentra ubicado en la comarca de La Costera, al sur de la provincia de Valencia. Concretamente, está situado a 75 km de la capital y a los pies de una colina en el Valle de Montesa. Allí, en la cima de esta colina se hallan los restos de un castillo de origen musulmán conocido como Castillo de Umbría o Castillo de Vallada que será nuestro objetivo.
Ruta al Castillo de Vallada
Nuestra ruta comienza en el área recreativa situada en el llamado Paraje de las Ermitas. Después de caminar unos metros observando cerámicas en las que se detallan antiguos juegos como el Sambori, la Comba o los Bolos, seguimos entre pinos hasta llegar a la piscina “La Saraella”. Rodeamos la verja, cruzamos un riachuelo llamado Aiguasal para continuar por un campo de olivos hasta salir a una senda que comenzó a subir sin compasión. Sorteamos varias veces el riachuelo, la senda se volvía cada vez más empinada y serpenteante, pero el paisaje no tenía desperdicio. Abundante vegetación de arbustos como lentisco, romero. brezo de invierno o bruguera, encinas y palmitos. De repente, pudimos ver perfectamente sobresaliendo por encima de los pinos la Penya de l’Àguila (dos ciclópeos bloques de piedra caliza que se levantan imponentes, a semejanza de las Tablas de la Ley). Sencillamente todo un precioso espectáculo. Continuamos subiendo por senda perfectamente visible en medio de bosque hasta llegar a una bifurcación en la que nos desviamos hacia la derecha en dirección al castillo. El camino bordeaba las faldas del coloso peñasco y nos condujo por la ladera del Barranco del Pou, estrecho y profundo, dejando al otro lado la Lloma del Pedregal o Solana del Castell. La excursión es una pasada, el contraste de gris de la roca caliza con el rojo de los yesos y el verde de la vegetación nos cautivó en nuestro ascenso. Hay un punto en el que encontramos el ultimo desvío hacia el castillo. Solo nos quedaban 700 m para llegar. Una ruta de unos 9 km en la que la mayor parte del recorrido es por sendas con bastante piedra, pero mucha sombra. Es perfecta para los acostumbrados a andar por montaña.
La fortaleza, formaba parte de una serie de castillos junto con los de Játiva, Montesa y Moixent. que eran parte de la defensa del llamado “Valle de la Costera”. Fue dañado seriamente como consecuencia del terremoto del año 1748. Hoy en día se conservan pocos restos, pero las vista desde allí son impactantes. La edificación tenía forma pentagonal junto al precipicio donde se ubicaban dos torres gemelas y un muro con pasillo y almenas. La vegetación, una pasada. Abunda la pebrella, el romero y la uva de Pastor. Las vistas espectaculares. Se divisa perfectamente el municipio de Vallada, el valle de la Costera, el castillo de Montesa. Játiva y su castillo, el paraje de las ermitas, el Peñón y mucho más.
Vallada
Parajes Naturales. Un espacio único desde el punto de vista geomorfológico, espeleológico y paisajístico.
El pueblo de Vallada destaca en cuanto a naturaleza por la variedad de parajes naturales que la rodean como, la Saraella, el túnel del Sumidor, el barranco de Boquella y el Penyó o Peñon. En el llamado paraje natural de las ermitas hay una zona de recreo, que es el punto de salida de numerosas excursiones y por supuesto también fue la ruta del castillo que nosotros hicimos. Este rincón dispone de refugio, pérgolas, paelleros, servicios, piscina, columpios para niños y zonas de esparcimiento. La piscina, construida a los pies del Peñón, se llena con el agua salada natural proveniente de la Saraella. En esta zona, las aguas que emergen de los manantiales son dulces, como también lo son las que discurren por el Túnel del Sumidor, (una cavidad con un desnivel de 205 m, en un recorrido de aproximadamente 1.300 m. que la convierte en la cueva más profunda del mundo entre las desarrolladas en yesos). Estás aguas se vuelven saladas en el momento que salen a la superficie. Esta salinidad, superior a los 40 gramos por litro, alcanza valores más elevados que el agua del mar, y es debida a la presencia de yesos y de halita o sal de roca (forma mineral del cloruro de sodio) que abunda en las rocas existentes entre el Tunel del Sumidor y la fuente Saraella, la cual, también le da el nombre al barranco que conduce las aguas hasta el rio Cañoles. Desde el punto de vista geomorfológico, se puede decir que el Peñón de Vallada es una formación kárstica típica, natural y muy pintoresca. Gracias a las escorrentías de aguas subterráneas permanentes que también desembocan en el río Cañoles, pueden verse los llamados Brolladors. Mención especial merece la singularidad del medio acuático, Uno de los lugares de mayor interés es el Túnel del Sumidor, la cavidad en yeso más profunda del mundo en desniveles kársticos. La entrada a la cavidad se sitúa en la base del Penyó, entre els Brollaors y la Saraella. La entrada divide el túnel en dos partes, aguas arriba, de unos 500 m. de longitud y aguas abajo, con unos 800 m. aproximadamente.
Cómo curiosidad y para que se entienda mejor la maravilla que es este paisaje, vamos a explicar lo que es el paisaje Kárstico.
El karst (típica meteorización química de ciertas rocas como caliza, yesos y dolomía). actúa sobre dos tipos de materiales distintos: las calizas cretácicas y los yesos del keuper, confiriendo al paisaje un carácter muy particular y presentando formas muy típicas, tanto macroscópicas como microscópicas. De este modo, se descubren en esta zona lapiaces (superficies pétreas irregulares), simas, dolinas, sumideros y surgencias, siendo habituales los desplomes y derrumbamientos del terreno, como fácilmente se aprecian en las vertientes del barranco de la Saraella. De entre estos accidentes geográficos destaca en el paraje de Vallada el Túnel del Sumidor, las surgencias de els Brolladors y la Saraella; y las dolinas o depresiones cerradas de forma circular –los conocidos Clots- que se prodigan aguas abajo de els Brolladors; así como otras estructuras macroscópicas, como el Penyó o la Penya de l’Àguila, y numerosas cuevas y cavidades calcáreas. llamada anteriormente saladella por ser manantial de agua salada.
Monumentos
También encontraremos en este paraje monumentos como la ermita del Cristo, de mediados del S. XIX, y la ermita de San Sebastián, de 1746 donde actualmente hay ubicado uno de los dos restaurantes existentes en el paraje. Además, también hay una gruta con la imagen de la Virgen de Lourdes junto a una la fuente llamada de la ermita.
En el municipio encontramos la escultura de hierro del Pare Presentat (siglo XVII), mercedario con reconocimiento de virtudes heroicas y a quien se le tiene especial devoción en el pueblo. Ya gozo durante su vida de una aureola de santidad. Fue el que promovió la construcción de la actual iglesia barroca de Vallada. Su pueblo natal.
Vegetación
Por lo que a la vegetación se refiere, contrasta la que encontramos en la Corda del Castell y Campello, con una considerable presencia de coscojares y pinares y la que puebla la zona de la Saraella, donde abunda un matojar con elementos yesíferos adaptados a las características del suelo. En la Penya de l’Aguila destaca la subunidad franxinetosum, y en el Barranco del Pou la aparición de abundantes helechos, detectándose, asimismo, en las zonas más rocosas, abundante flora de carácter rupícola.
Gastronomía
Destaca por su especialidad arrocera. Así entre las diferentes maneras de prepararlo destaca el arroz a Banda. Dulces caseros como la Fogassa, los buñuelos de calabaza, los rosegones y la coca de llanda.
Artesanía
La cestería de mimbre y el mueble de rattan.
Resumiendo
La belleza del paisaje convierte a Vallada en el lugar apropiado para poder disfrutar practicando senderismo de recursos naturales, botánicos y patrimoniales. ¿Te lo vas a perder?